comentarios sin retorno…

El sol irrumpía en la habitación de Miguel iluminándolo todo, mientras él permanecía inmóvil sentado en un lado de la cama, tembloroso y pálido dirigía su mirada al techo donde minutos antes había preparado y colocado una soga. Entre sollozos acerca una silla y la coloca justo debajo de la soga, mira a su alrededor, baja la cabeza y rompe a llorar mientras se sube e introduce en su cabeza el lazo mortífero, se lo ajusta y da el salto que le llevaría a la libertad que tanto buscaba.

Minutos después llega al piso su novia, Jana, que había quedado con el para visitar a un psiquiatra debido al comportamiento extremadamente fatalista y depresivo que Miguel había demostrado las últimas semanas. Jana entra en el piso y llama a Miguel, pero él no le responde, se dirige a su habitación y se da de bruces con el macabro suceso, entre gritos y llantos Jana intenta levantarlo por los pies, pero no tiene suficiente fuerza, corre a la cocina y busca un cuchillo para cortar la cuerda, levanta la silla y se sube, con los brazos estirados y de puntillas consigue cortar la soga y Miguel cae inerte al suelo, provocando que Jana pierda el equilibrio y caiga de la silla golpeándose la cabeza contra el pomo de la puerta, el golpe fue brutal abriéndole una gran brecha en la cabeza donde emanaba la sangre como si de un grifo abierto se tratase. Poco a poco la sangre de Jana se abre camino por la baldosa de la habitación y llega al cuerpo de Miguel frenándose en su cara, esta sensación fue la que hizo retornar a Miguel en sí, poco a poco abre los ojos, su primera visión es borrosa y piensa para el “Estoy muerto”, pero la fatalidad se muestra ante él, a medida que su visión se torna mas nítida, “encontrándose” con Jana tirada en el suelo con la cabeza abierta.

Miguel trata de incorporarse pero se da cuenta de que le es imposible, no tiene movilidad de cuello para abajo, lo único que puede hacer es observar, impotente, como a Jana se le escapa la vida por la brecha de la cabeza.

Un mes más tarde Miguel reposa en una cama de hospital, los médicos le diagnosticaron una grave lesión de médula así como un trastorno psicológico severo todo ello causado por su intento de suicidio.

Miguel estaba tetrapléjico, condenado a vivir postrado a una cama y con el añadido de ser el responsable de la muerte de su novia (que toda su familia le atribuía) ahora lo veía claro, se daba cuenta de que aquel sufrimiento inicial por el cual tomara la decisión de quitarse la vida quedaba anulado completamente por la muerte de Jana y por la situación actual en la que se encontraba, su situación era sin retorno, sin posibilidad de mejorar las cosas. todo ello provocado por su actitud cobarde que causo el efecto contrario y arrastrando a muchas personas a una muerte en vida.

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